La Doña o Nunca digas de este agua.....

                                                                            Foto: Isabel Muñoz

Hay algunos refranes que parecen creados para mi.
Si tuviera que describir un perfil de mujer ideal para pasar el resto de mi vida, seria alguien muy parecido a mi, con una educación y cultura parecida, unas experiencias parecidas, con una edad parecida a la mia, y unos gustos afines, y ha sido a si durante toda mi vida.



Mi ultima pareja, Raquel, con la que mantuve una relación de siete años que termino de manera muy civilizada, respondía a ese perfil, decidimos romper cuando nos dimos cuenta “que se acabo el amor de tanto usarlo” mi cuñada me dijo que eso de dejar las cosas civilizadamente es señal de que nunca hubo pasión, y quizá tenga razón, la pasión, si la hubo, desapareció y dejo paso a la amistad sincera y a veces no tan desinteresada.
Después de romper con Raquel, me tome unos meses de vacaciones, pedí una excedencia y me propuse disfrutar de mis padres, en los últimos años apenas los había visto, y notaba que se me hacían mayores, los reproches velados de mi hermano quizá tuvieron algo que ver con mi decisiòn de dejar la capital y regresar al pueblo.
-Paz, en los últimos tiempos no has estado con los papas mas que un mes al año, si siguen los achaques tendremos que contratar a alguien que los atienda y cuide.
Recogí mis cosas de casa de Raquel, alquile mi casa del centro de la ciudad y me instale en el pueblo en casa de mis padres durante mi año sabático.
Regresar al pueblo donde naci, pueblo del que nunca senti arraigo, del que sali siendo una niña al colegio interna y al que regresaba en contadas ocasiones en vacaciones, supuso un descubrimiento tanto en lo personal como en lo espiritual, me sentía como el Dr. Fleishman a su llegada a Cicely, naturalmente nunca pensé que podría encontrar alli a mi Srta O´connell.
Despues de tres meses de retiro voluntario, desconectada del mundo del que me habia sentido participe los ultimos veinte años, sin ver a ninguna de mis amistades habituales, solo me quedaba el hilo de internet para comunicarme y sentirme unida con los seres de mi especie.
En la casa del pueblo mi vida transcurria monotona, entre la escritura de mi libro y los articulos de opinion de la revista “Cuadernos 4” y la atencion a mis padres.
Mi madre tan contenta de tenerme para ella, mi padre preocupado por mi futuro, -de que vas a vivir estos meses sin trabajo?- del alquiler y de mis ahorros papa.

Un Domingo de comida familiar, mi cuñada intento animarme a que participara en una reunión de las que se organizaban en el pueblo para recaudar fondos para un acto benéfico- festivo o algo asi.
-Mujer asi te entretienes y conoces gente, que llevas mas de tres meses de encierro voluntario y esto no es ninguna condena.
Mi hermano la secundo en su propuesta y mis padres hartos de mi desinterés por el mundo y de verme continuamente pegada a la pantalla del ordenador me recomendaron hacer caso a la invitación de Manoli, tanto insistieron que tuve que acceder aunque a regañadientes.
-Vale ire.
-Es el viernes, nos reunimos en el centro cultural y después nos vamos a cenar a “casa Loli”, somos unas seis, ya las conocerás, ¡ah!, y hay una compañera de trabajo de tu hermano que tiene mucho interés en conocerte-
Demás esta decir que me pico la curiosidad por saber quien era la interesada.

El viernes por la mañana fui la peluquería a intentar arreglar lo inarreglable, mi pelo, una vez allí y pedido el turno para lavar, teñir, vaciar y secar, me dispuse a esperar libro en mano, pero no me pude resistir al ultimo numero de la revista HOLA que en primera pagina mostraba a un sonriente rubio con dos niños en los brazos, el rubio en cuestión era un cantante, por lo visto famoso, que había sido padre por inseminación artificial y vientre de alquiler supuestamente, (Señor, Señor como esta el mundo) de mellizos, no llegué a leer la noticia, y me quede con las ganas de saber si le preguntaron por la madre.
Llego como un vendaval, atropellando a tirias y a troyanas, monto el guirigay y todas las clientas de la peluquería le rieron las gracias.
-Paqui mueve el culo que tengo prisa, no he podido venir antes, tenia que llevar a mi hija a hipica y a Antonio a recoger el Mercedes a Valencia.
En tres segundos nos habia dejado claro que era una mujer muy ocupada y con dinero, era la Doña, la llamábamos asi mi hermano y yo desde que en unas vacaciones llego a casa de mis padres la invitación a un acto cultural patrocinado por la empresa de su marido con el encabezamiento de D….. y Doña ……. Tienen el placer de invitarles……. Desde entonces “la doña” era un personaje mas de nuestras conversaciones sobre los frikis del pueblo, era ese tipo de mujer a la que le gusta ser el perejil de todas las salsas, la novia en la boda, el niño en el bautizo…..

Mi cuñada paso a recogerme a casa para ir juntas a la reunión, fuimos las primeras en llegar, a continuación llegaron las demás, Susi, Carolina, Beba, Alexandra, todas ellas menores que yo, Beba era la compañera de mi hermano que estaba interesada en conocerme, cuando ya habiamos hecho las presentaciones aparecio ella, ¡!la doña¡¡, me quede de una pieza, era la ultima persona que pense encontrarme en la reunion, Manoli hizo la presentacion.
-Paz, esta es Ana la presidenta de nuestra asociación.
-Encantada, -dije marcando la distancia.
-Encantada de verte de nuevo Paz- dijo ella con tono decepcionado.
Al termino de la reunion en la que todas intervinieron exponiendo sus trabajos y puntos de vista, Ana cerro la convocatoria con un escueto- se cierra esta sesion, pasare a limpio lo que habeis propuesto y ahora vamos a cenar, - y nos marchamos al restaurante.

Me sente todo lo alejada que pude de Doña Ana, intentando coincidir con Beba en la mesa, y conseguido mi objetivo me despreocupe de integrarme en la conversación del grupo, y fije el maximo interes en mi vecina, con cierta coquetería me dispuse a pasar la velada desplegando mis oxidadas artes de seductora.
Como todas las reuniones de mujeres hetero, los principales temas de conversación son los referidos a ellos, maridos, novios, hijos,enfermedades, y en el colmo de la originalidad, comentar los últimos cotilleos de la población, separaciones, cuernos, embarazos no deseados y peleas vecinales, todo lo oia con absoluto desinterés hablando con mi vecina de mesa sobre mis interesantes artículos de sociología en una revista de tirada mediocre pero muy prestigiosa, fue entonces cuando Alexandra soltó la bomba,.
-No se si sabréis, pero me han dicho que Juan y Marga se separan por que él es gay y esta con un chico de Valencia.
-Ohh!!! que original, como se le ocurre semejante cosa al tal Juan liarse con un Valenciano, lo suyo hubiera sido liarse con un Alicantino,- dije con ironia
-Lo conoces?-replico Beba con cara de incredulidad
-No Beba, no lo conoce, lo dice de cachondeo- aserto “doña” Ana.
-Pues a mi me parece una putada, estar tanto tiempo con tu mujer y después salir con eso, si me hace a mi eso Miguel me muero del disgusto-repuso Susi.
Hubo comentarios de todos lo colores, Beba con todo su bagaje sociológico soltó otra perlita.
-Me parece bien todo eso, pero mira si tengo un hijo no me gustaria que fuese asi, no es por nada pero esas personas deben ser muy desgraciadas.
Mi cuñada me miraba con cara de “no me lo puedo creer” y yo la miraba con cara de ¿donde coño me has traido?.
-Esas personas son tan felices o tan desgraciadas como tu y como yo, y si uno de mis hijos fuese homosexual yo le diria ¡Ole tus cojones por reconocerlo¡, Juan se ha enamorado, que mas da que sea de un hombre? Lo que deberia importarnos es que sea feliz por una vez en su vida, si con Marga no ha podido serlo.
La autora de tan ecuánime comentario no habia sido otra que la mismísima Doña, que al otro lado de la mesa nos obsequiaba con una de cal y dos de arena.
El caso es que a raiz de ello, yo empece a mirarla de otra forma y al final de la noche me parecio una mujer muy interesante, no se si fue merito de suyo o de la media botellita de vino con su correspondiente cubata que me tome en la cena.
Durante los dias que siguieron fui incapaz de quitarme a “la doña” de la cabeza, sus ojos verdes y su maravilloso trasero eran mi sueño mas recurrente, pudiera ser que por el largo ayuno al que estaba sometida voluntariamente desde que deje a Raquel.
Dos semanas despues en el mercadillo de los jueves coincidimos en un puesto de fruta y verdura, me hice la encontradiza, ya la habia visto al entrar en la calle y prácticamente la segui hasta que se paro en el puesto.
-Hola,¿ como estas Ana?
-Hola, bien, bien ¿y tu? Tus padres estan bien?
La conversación no podia ser mas impersonal y eso me produjo una sensación de frustración, no era eso lo que estaba buscando cuando la vi, al despedirnos y cuando acerque mi cara para darle un beso acerco su boca hasta casi la comisura de mis labios, no fue casual, es un truco muy habitual, me sorprendió y me gusto su osadía.
La llame, pedí el teléfono a mi cuñada que asombrada me pregunto a que se debía semejante novedad.
Quede con ella en la única cafetería decente del pueblo y cuando la vi llegar me arrepentí de haberlo hecho, era algo estúpido, quizás yo la había idealizado a causa de sus comentarios.
La conversación con alguien a quien apenas conoces y a la que durante años has adjudicado montones de defectos puede ser un sin sentido, ¿ de que hablar y para que?.
Una vez tomamos el café me invito a que la acompañara a un lugar muy especial para ella, subí en su espectacular todo terreno y me llevo a un paraje de la montaña que yo no conocia.
-Que te parece?, es el sitio mas bello de toda esta sierra, vengo aquí para evadirme de todo, para ser yo, quizás para esconderme .
-Y eso? Por que te escondes?
-Por que no me siento cómoda mostrándome como soy, asi que me he fabricado un personaje, me gusta mucho el teatro, solo cuando vengo aquí me permito salir de mi personaje y ser yo, Ana una persona que se siente muy sola, y que no le gusta nada la manera como vive.
Parecía afectada, triste, durante el tiempo que habíamos estado en la cafetería no me dio esa impresión, pero en la sierra sin nadie mas alrededor le cambio la cara.
Volvimos al pueblo, no me dijo nada mas de su frustración, ni de su tristeza, hablamos de la belleza del entorno y de mi desconocimiento del pueblo y sus alrededores, quede con ella para que me mostrara poco a poco sus lugares favoritos, me dijo que la mejor manera de hacerlo era caminando.
Empezamos a salir los fines de semana, ella preparaba el recorrido y me lo enviaba por email, quedábamos en la puerta del casino, emprendíamos la caminata hablando o en silencio, me sorprendió lo cómoda que me sentía con ella, en su compañía.
Un mes después habíamos recorrido la mayor parte de la sierra, durante las caminatas hablamos de todo lo que se nos ocurría, cuando yo le hablaba de mi trabajo me escuchaba con arrobamiento y admiración, siempre terminaba diciéndome que me envidiaba, que hubiera dado cualquier cosa por haber ido a la universidad, leía de manera indiscriminada todo lo que caia en sus manos, intentaba estar al dia en todas las nuevas tecnologías, usaba internet, pero a veces y sin explicación se quedaba callada durante horas, no es que estuviera ausente, pero algo me indicaba que necesitaba el silencio para pensar, yo respetaba esos silencios y cuando me dirigía la palabra podía ser con cualquier nimiedad.
-Paz, mira esa flor, es de la familia de las orquídeas.
Y nos parábamos un buen rato a observarla.

Durante el tiempo que duraron nuestras excursiones por la sierra procuramos ir solas, fue un pacto tácito, yo esperaba que llegara el dia para poder disfrutar de su compañía como si fuera el mas preciado de los regalos, impaciente como un niño en vísperas de reyes.
Yo creia que ella sabia, o al menos sospechaba sobre mis preferencias sexuales, pero no me comento nada al respecto, hasta que un dia.
-Oye Paz, que te parecen las relaciones por internet?
-Me parecen una barbaridad.
-Por que?
-Por que, ¿ que?
-Tu no tendrias una relacion por internet?
-No, conozco a gente que lo ha hecho y han salido muy mal de ellas.
-Ya, pero si no tienes oportunidad de conocer a nadie que sienta como tu por que estas encerrada en un pueblo como este, lo harias?
-No lo se.
-Si te digo algo me guardaras el secreto?.
-Claro, necesitas desahogarte?
-Si.
-Estoy pensando en separarme, creo que me he enamorado.
-Por internet???
-Si, lo jodido es que,…… es muy fuerte no se si contártelo.
Intente darle garantías de mi discreción, no se si lo conseguí, pero su necesidad de desahogo fue superior a su cautela.
-Es que es una mujer………………….no me dices nada?
-No se que decir, no te conozco lo suficiente, pero si buscas mi opinión, con respecto a los chats te diré que la gente que los usa suele mentir mucho, y a veces no es oro todo lo que reluce, asi que lleva mucho cuidado.
No hablamos mas, regresamos a casa, fui todo el camino pensativa y triste, no se por que razón me sentía rechazada, como si me hubieran dado calabazas, no acertaba a comprender los motivos de mi decepción y anduve varios dias cabizbaja y pensativa.

Una noche después de un sueño especialmente erótico, sentí como me corría, fue un orgasmo intenso, la mujer inclinada entre mis piernas alzo su cara y era la de Ana, desperté sobresaltada.
Ese sueño me aclaro el porque de mi mal humor, me estaba ilusionando con Ana, no es que fuera amor, pero de todas las mujeres que había conocido en los últimos tiempos era la que mas me excitaba, me resistí a ese deseo durante algún tiempo, pero mi sexo era mas tozudo que mi cabeza, cada vez que la veia me ponia como una moto y tenia que cambiarme de bragas.

Nuestra amistad, no paso desapercibida para mi familia, mi hermano se cachondeaba de mi recién estrenada debilidad por “la doña”.
-Hermanita esa mujer te ha abducido y te has transformado, te veo puesta de peineta y traje regional en las próximas fiestas.
Las excursiones terminaron de manera un tanto brusca, y la única manera de vernos era coincidir en la calle o en las reuniones de los viernes, pero siempre en compañía, lo que dificultaba la intimidad y las confidencias de las que habíamos disfrutado en las caminatas por la sierra.
En una de las reuniones de los viernes Ana me pidió una cita a solas, comento que tenia que decirme algo muy importante, su gesto serio me indico que la cosa era muy grave y quedamos para el dia siguiente a la hora del café.
-Paz, te necesito, estoy en una encrucijada y tu eres la única en quien confío.
-Que pasa? Los niños, Antonio?
-No, bueno todo tiene su relación, recuerdas lo que te dije hace unas semanas,
-Todavía sigues con eso de internet?, -dije notablemente decepcionada.
-No solo sigo, sino que he quedado con ella mañana, tengo que verla, se ha convertido en una necesidad, por fin voy a comprobar lo que llevo tanto tiempo sospechado.
-Que? Sospechas que te gustan las mujeres? Eso no se sospecha, eso se sabe o no. Y además tienes un montón de vecinas de las que te podrías haber enamorado y si no lo has hecho es que……
-Mira aquí eso es imposible, no conozco a nadie que pueda tener ese tipo de inclinación, asi que debo ser un bicho raro.
Respire hondo, le dije que de bicho raro nada, que en el pueblo habían varias lesbianas declaradas, y otras aunque lo disimulasen no podían ocultar la pluma.
-Yo, sin ir mas lejos soy lesbiana.
-Tú?, el caso es que lo sospechaba, pero no me atrevía a preguntártelo, entonces debes entender por lo que estoy pasando, ¿y si esa mujer es la persona que he estado esperando toda mi vida?
Como contestar esa pregunta sin cabrearme? Como decirle que si lo que quería era probar, allí estaba yo para hacerle el servicio, que no me molestaba en absoluto ser su conejillo de indias, pero lo que respondí fue algo muy distinto.
-Esta bien, y como quieres que te ayude?
-Que debo hacer? Crees que debo ser efusiva y besarla? O por el contrario ser respetuosa y …
-Hasta donde habéis llegado por el chat?
-Pues …… nos hemos dicho cosas muy fuertes.
-como de fuertes? –dije en tono de evidente mal humor.
-Pues le he dicho que me gustaría besarla, que solo pienso en eso y pasear con ella de la mano y abrazarla.
-La conoces? Te ha enviado alguna foto?
-Si, la he impreso, mira.
Me enseño la foto de una mujer de mediana edad, morena, regordeta y con los ojos pequeños,
- Se llama Amparo, es secretaria de una empresa de construcción, y esta soltera pero vive con sus padres, así que nos veremos en Valencia.
-Dentro o fuera?
-Dentro, nos hemos citado en la plaza de la virgen.
-Que si esta fuera del armario o dentro? Vamos, si sus padres o sus amigos lo saben?
-No lo se, pero por lo que me cuenta no creo que lo sepa mucha gente
-Poco te puedo aconsejar, conoceos primero, no hagas nada sin meditar las consecuencias
Me contó la historia de su relación con Amparo, como se conocieron, como la alegraba recibir correos de ella, lo a gusto que se sentía hablando con ella hasta el amanecer.
Para ella todo eso la sacaba de su rutina, la ilusionaba, la mantenía viva, era una aventura, su aventura.
Debo reconocer que sentí una punzada de celos, no tenia muy claro si lo que deseaba era que Ana tuviera una buena cita o que se decepcionara con el encuentro, en ambos casos la que salía perdiendo era yo. Si funcionaba lo suyo con Amparo yo tendría que dejar de hacerme ilusiones, y si fracasaba, quizás se diera por vencida y abandonara todo interés en probar con otra.
Intente no pensar en ello los días siguientes y centrarme en el cuidado de mis padres y en escribir un par de artículos que me habían encargado para la revista de Sociología en la que colaboraba.
El viernes siguiente muerta de impaciencia pregunte a mi cuñada.
-Manoli, ¿hoy tenéis reunión?.
-No Ana la ha aplazado tenia no sequé en Valencia, pero la tenemos mañana por la tarde.
-Puedo ir?
-Claro, tu siempre eres bienvenida.
Veinticuatro horas mas de incertidumbre, pero convencida de que el “noseque” de Valencia le había gustado lo suficiente como para repetir.
Llegue tarde a la reunión del Sábado, estaban discutiendo el punto tres, la empresa de Ana iba a subvencionar parte de unas instalaciones deportivas y el Ayuntamiento tendría que dar los permisos, la discusión sobre el coste de la obra, los fontaneros, dotación para electricidad o gas.
Yo las escuchaba sin intervenir, el peso de la reunión lo llevaba Ana, que exponía los temas económicos como una profesional, presupuestos, formas de financiación etc…. al termino de la reunión exclame contenta -¡¡ahora vamos a cenar a “casa Loli”!!, Ana se excuso.
-No puedo ir perdonadme, el viernes que viene quizá.
No lo pude evitar me salio del alma mi gesto de decepción.
-Joder Ana, yo había venido por la cena, si tu te vas no es lo mismo.
-Hoy no puedo Paz, pero mañana si te apetece nos vemos en el “butterfly” y tomamos un café.
Seca, concisa y sin opción a replica.
El Domingo a las 4,30 p.m. me presente en el pub “·butterfly”, ella estaba esperando, con un café delante y charlando animadamente con la camarera.
-Hola.
-Hola
Dos besos.
-Que te apetece tomar.
-un café.
Una vez roto el hielo del encuentro me quede mirándola con gesto de interrogación, ella seguía callada hasta que ya no pude mas y pregunte.
-Y bien ¿Cómo fue?
-Ya te contare.
-Pero no puedes dejarme así otra semana, cuenta ya de una vez.
-Aquí no puedo, hay demasiada gente.
-Bueno pues vayamos a otro lado.
-Son las cinco, te vienes al pico del encino? En media hora estamos allí.
-Se nos va hacer de noche, pero vale.
Subimos a la sierra en silencio, era el lugar preferido de Ana, donde se sentía ella misma, frente a un increíble atardecer empezó el relato de su encuentro con Amparo.
- Nos vimos, pasamos la tarde juntas, hablamos de sus padres, de sus obligaciones, de sus gustos, de sus amigos, de su pueblo, fue todo muy cordial, pero………..
- Pero que?
- No me atreví, no pude ni siquiera darle un beso, y lo había deseado tanto, cuando veo películas en las que se dan un beso dos mujeres, me siento tan excitada que quizá había puesto demasiadas esperanzas, y luego no me atreví.
-Pero la chica te gusto?
-Si, bueno, es una buena chica, seria, muy responsable.
-Esta buena?
-Eso es una ordinariez Paz, no es propio de ti.
-Perdona, pero creo que es lo que importa, si te gusta, si te excita sexualmente como cuando ves a dos mujeres besándose en una película, no me estaba refiriendo a su físico.
-Ya te he dicho que……
-Si, si, seria, formal, pero no lo suficiente como para………..
-No, no lo suficiente y es culpa mia, tengo el listón muy alto, quizá deba de dejar de ser tan exigente.
-Tienes el listón muy alto? Con respecto a que?.
-Pues en lo que busco en una mujer.
Recordé el catalogo por el cual he medido mis relaciones con las mujeres toda mi vida, esta si, esta no, y no me ha ido precisamente bien.
-Paz, con Amparo como con otras me pasa que continuamente las comparo y claro salen perdiendo.
-Con quien las comparas? Hay alguien ahí en tu subconsciente?
-No, no esta en el subconsciente, esta en el consciente y demasiado presente en mi vida, sobre todo últimamente.
-La conozco? Háblame de ella.
Yo sabia que eso era probable, que aquella maravillosa mujer de la que me habia encoñado hasta las cejas, estaba o habia estado enamorada de alguien y que era un amor imposible, respondía a ese perfil, yo y mi manía de socio analizar a todo bicho viviente.


El sol acababa de ponerse en el horizonte, la noche nos envolvía y apenas podía ver su cara, sentadas en el ribazo de una fuente, me estremecí, la temperatura había bajado bruscamente con la puesta de sol.
-¿Te parece que nos metamos en el coche?, -me pregunto-
-No solo me parece, sino que te lo ruego, me he quedado helada.
Subimos en la parte trasera, puso una manta de viaje sobre mis piernas, se quito la cazadora me la echo por los hombros, y envuelta en su perfume, escuche su relato.
-Es una larga historia, empieza en mi niñez, yo tendría unos seis o siete años, jugaba en el patio de mi casa, contiguo con el de mi tia Águeda, mi prima y su mejor amiga recogían cosas para hacer el Belén en casa, musgos, piedras, a mi prima se le ocurrió ir al río a por piedras redondas para hacer el camino de los reyes magos y yo me emperre en ir con ellas, mi tia las obligo a que me llevaran y les advirtió que cuidaran de mi, eran tres años mayores que yo.

En el río mientras ellas elegían los cantos mas redonditos y blancos, yo saltaba de piedra en piedra, siempre he sido un poco hiperactiva, hasta que resbale y me caí al agua, me moje toda, mi prima y su amiga asustadas por el enfado de mi tia me llevaron a casa de su amiga corriendo, me desnudaron e intentaron secar la ropa para que nadie notara el percance, mientras mi prima secaba mi vestido y los leotardos con el secador, su amiga me puso su albornoz, y me abrazo fuerte para que entrara en calor y para que no me moviera, yo me quede quieta sintiendo su abrazo y su calor, me dio un beso en la mejilla y me dijo –“ no te muevas bicho”, ese beso y ese abrazo me han marcado, nunca sentí nada mas tierno y que me emocionara tanto, desde entonces estoy enamorada de esa mujer, crecí viéndola desde lejos, ella se marcho interna a un colegio de Valencia, venia los veranos pero jugaba con sus amigas y a mi ni me veía, después dejo de venir, la universidad, los estudios fuera de España, yo me enteraba de su vida por mi prima que seguia en contacto con ella, le preguntaba de pasada, y cuando sabia que venia a ver a sus padres, la vida se iluminaba, solo la esperanza de encontrarme con ella por la calle me ponía nerviosa, mientras tanto empecé a salir con Antonio, me case por cabezonería y por salir de mi casa, las cosas nos empezaron a ir bien, tuve a mis hijos, y cuando sabia algo de ella, que había publicado algo, era la primera en comprar sus libros de sociología, de leer los artículos en las revistas.
Cuando venia a Valencia a dar una conferencia, yo me las arreglaba para asistir, la veía allí en la tarima, cada vez mas guapa, inteligente, cuanto mas éxito tenia en su profesión mas lejos la sentía, pero no podía dejar de amarla y así fueron pasando los años, hasta que un buen día del año pasado me la encontré en el pueblo, vino a cuidar a sus padres y casi sin pensar, se convirtió en una presencia constante, no solo no me la podía arrancar del corazón, es que no me la puedo quitar de la cabeza, y no es como me la había imaginado, es que es mucho mejor, y me tiene loca, no duermo, nada me importa si no esta ella, y se que es imposible, que tengo que olvidar, y conformarme con Amparo que es muy buena chica, pero no es ella, y he tenido que dejar de subir con ella a la sierra, por que un dia de estos hago una locura y la beso sin pedirle permiso ni nada. Y por eso no pude besar a Amparo, por que nadie la puede borrar de mi cabeza ni de mi corazón, al menos por ahora.
Mire el reloj en el salpicadero del coche, marcaba las 11, 15 de la noche, ella con la cabeza vuelta hacia la ventanilla casi me daba la espalda, dejo de hablar, los cristales del coche se habían empañado y desde el interior se veía la luna llena tamizada por el vaho.
La abrace por la espalda como la primera vez, me acerque a su mejilla y deposite un beso en ella.
-No te dije bicho, te dije “mico”. Y ahora te voy a dar un beso sin pedirte permiso.
Se volvió, la bese, sabia que era su primer beso, y estaba segura de que no seria el único.

Ha habido muchos mas besos, caricias, que con ella son nuevas, miradas de complicidad y el sexo mas increíble que he disfrutado en los últimos veinte años.
Y aquí me encuentro enamorada como una colegiala de la única mujer en la que nunca me habría fijado, incumpliendo una de mis máximas, ¡¡jamás una mujer casada!!, viviendo en el único lugar del mundo que considere el infierno y ahora precisamente por que esta ella, es el paraíso.







                                                           fin









lrc

7 comentarios:

Camino dijo...

A sus pies.

relatos de lorca dijo...

Agradeccciiiiiiiidisssiiiiima, por leer lo que en este sitio escribo. Por tanto la que se posa a sus poeticos pies es una servidora.

lrc

LuPi LuKe dijo...

Los pueblos, nunca dejan de sorprendernos hay tanta gente viviendo en el armario... Yo he vivido ahí y es agobiante, cuando sales y respiras aire fresco te toman como referente aquellas personas que se hallan dentro todavía. Que sepas me ha gustado mucho la historia!

relatos de lorca dijo...

Me alegra saberlo Lupi Luke, eres un ejemplo a seguir.
Gracias por tu comentario.
lrc

Airam dijo...

Cuantas veces he leído ya todos tus relatos...y al volver a hacerlo me sorprenden nuevos matices. Muchas gracias por tu tiempo y por aquello q pones en cada uno de ellos.

Anónimo dijo...

Que impresionante....también el relato.

relatos de lorca dijo...

Me siento muy halagada con tu comentario Airam, espero que lo que escribo te siga interesando.
Anónimo te refieres a la foto ¿no?
Besos
Lrc